¿Quieres darle un impulso de luz y tersura a tu cutis?
Dedícate un tiempo de autocuidado facial con ingredientes disponibles en casa. Con 20- 30 minutos de cariño a ti misma, sentirás tu energía vital restaurada y tu piel lo reflejará. ¡Prueba este Ritual de belleza natural y me lo cuentas!
Cada luna menguante es ideal para deshacerte de algo, limpiar casa y cuerpo. Esto incluye tu piel y vas a lograrlo con ingredientes ricos en vitaminas y antioxidantes que contienen estas fórmulas sencillas hechas con ingredientes caseros para que hagas un Ritual revitalizante para tu cutis.
Limpia tu cutis o desmaquíllate con leche
Usa leche animal o vegetal para limpiar o desmaquillar tu cutis con discos de algodón.
Cualquiera de ellas contienen agua y grasa, que emulsionarán la suciedad a la vez que hidratan aportando vitaminas, proteínas y minerales.
Puedes usar leche de vaca. oveja o cabra.
El colágeno, las vitaminas A, B, D y E, la lactosa y el alto contenido en calcio de la leche contribuyen a que tu cutis luzca más joven, luminoso y bonito. Además contienen ácido láctico que tiene un efecto exfoliante.
Las leches vegetales de arroz, soja, avena, almendras, avellanas, quinoa, sésamo, etc., cualquiera de ellas son nutritivas, antioxidantes y ricas en vitaminas, proteínas vegetales y minerales, siendo la de arroz muy usada para aclarar manchas.
Te dejarán hidratada con un brillo y tersura excepcionales.
Si no pasas al siguiente paso del ritual y notas tirante la piel cuando se seque la leche, puedes enjuagarla con la mejor agua que dispongas.
Mascarilla revitalizante de miel
La miel es oro líquido. Cuanto más pura y menos procesada sea, más vitaminas tendrá. Si puedes elegir, compra siempre miel cruda. La miel de azahar, romero o lavanda son las mejores para el cutis, pero usa aquella que tengas disponible.
Con tus dedos pon una fina capa por todo tu rostro, untando desde el centro a la periferia, en forma radial. Deja actuar entre 15 y 30 minutos, mientras te tumbas y te relajas, escuchando música o una meditación. Retira con agua fría si es verano y tibia si es invierno, (según tu ubicación). El contraste de temperatura, estimula la circulación.
La miel es antibacteriana, equilibra la producción de grasa y aclara el tono de la piel. Limpia profundamente, es exfoliante, calmante, antiinflamatoria y combate el acné. Además, hidrata y revitaliza la piel madura, previene aparición de granitos y alivia las quemaduras de sol.
Contiene ácidos orgánicos (cítrico, láctico, fosfórico…), vitaminas (C, B1, B2, B3, B5, D y E), ácido fólico, minerales (fósforo, calcio, magnesio, silicio, hierro, manganeso, yodo, zinc, oro y plata), aminoácidos esenciales, esteroles, fosfolípidos, flavonoides, polifenoles y enzimas.
Serum nutritivo de aceite
Por último, si tu piel es seca, elige el aceite vegetal más puro que dispongas para mantener la humectación y aportar vitaminas, extendiendo una fina capa. Masajea desde tu nariz a la frente y a las sienes, sin olvidar el cuello ahora, ni en ninguno de los pasos anteriores.
Los aceites penetran en la dermis aportando vitaminas y minerales que nutren y estimulan la regeneración celular.
Aunque tendemos a comprar aceites de uso cosmético, aquellos que disponemos en la cocina, también puedes ponerlos en tu cutis: oliva (vit. A, D, E, K,), coco (vit. E y K), girasol (vit, A, C y D), soja (vit. A y E), argán (vit. E y escualeno), sésamo (vit E), etc.
Si dispones de rosa mosqueta, onagra, uva, caléndula, o cualquier otro aceite de uso cosmético, puedes usarlo, por supuesto. Así como si quieres hacer una sinergia con varios de ellos. Déjate llevar de tu afinidad o atracción.
Alternativa al Aceite: Tónico de hierbas o flores
Si tu piel es grasa o no quieres usar aceite, haz una infusión de manzanilla, té verde, cola de caballo, o cualquier otra infusión que tengas para finalizar tu Ritual de belleza con un tónico calmante y antioxidante. Si tienes rosas cerca, puedes recoger sus pétalos y hacerla con ella. Aplícalo cuando esté frío, en verano, o templado en invierno.
Cuando no te sientas bien anímicamente, deprimida o estresada, elige prodigarte cuidados físicos, es una forma de darte amor y disfrutar de tus sentidos! Bajar de la mente al cuerpo para estar presente.
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